La administración Trump sigue desplegando agentes federales sobre la población, aterrorizando a las comunidades de inmigrantes en todo el país. ICE ha arrestado a más de 200 000 personas desde enero y, a pesar de las afirmaciones de la administración, estas redadas no están dirigidas a los delincuentes. La gran mayoría de las personas detenidas por ICE son trabajadores de bajos ingresos sin antecedentes penales. Estas redadas tienen un único objetivo: aterrorizar a los trabajadores inmigrantes e intimidar a quienes se resisten.
Hemos visto vídeos espantosos de agentes de ICE enmascarados invadiendo edificios de apartamentos en mitad de la noche, arrestando violentamente a personas en las entradas de sus casas y sacándolas a la fuerza de sus coches. Están secuestrando a personas en hospitales, juzgados, escuelas y tiendas de comestibles. Y, en algunos casos, los agentes han embestido los coches de los inmigrantes o han disparado sus armas contra personas que se encontraban en vehículos. Muchas familias no tienen ni idea de dónde están sus seres queridos después de haber sido detenidos por ICE. Más de 20 personas han muerto bajo la custodia de ICE en lo que va de año, ya que se les mantiene en jaulas con escaso acceso a comida, agua y medicinas.
Recientemente, Trump amenazó con enviar a ICE y otros agentes federales al área de la bahía de San Francisco para aterrorizar a los inmigrantes y atacar a cualquiera que se interpusiera en su camino. En el último momento, Trump canceló este despliegue, ya que miles de personas en toda el área de la bahía se preparaban para resistir este uso flagrante de la violencia estatal. Trump afirmó que algunos de sus amigos multimillonarios le dijeron que su operación causaría demasiados trastornos a sus negocios. Así que, por ahora, ha decidido esperar.
Y mientras el cierre del Gobierno de Estados Unidos entra en su cuarta semana y decenas de miles de trabajadores federales han perdido sus puestos de trabajo y sus ingresos, el financiamiento de las agencias de terror de Trump, incluyendo ICE y Aduanas y Protección Fronteriza, continúa en niveles récord. Se espera que el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP), conocido como cupones de alimentos, se quede sin financiamiento tan pronto como la próxima semana para unos 42 millones de personas en todo el país. FEMA también ha recortado más de 11 000 millones de dólares en fondos para ayuda en caso de catástrofes a los estados. Pero, mientras tanto, estas agencias de terror e intimidación pueden operar sin restricciones en todo el país, con presupuestos prácticamente ilimitados.
Solo el presupuesto de ICE se ha incrementado a 150 000 millones de dólares entre ahora y 2029, lo que supone 37 500 millones de dólares al año. Esto es más que los presupuestos militares de todos los países del mundo excepto 15. Se han asignado unos 45 000 millones de dólares solo para construir más centros de detención. Están tratando de duplicar el número de centros de detención para poder retener a más de 100 000 personas en todo el país.
Las prioridades de este gobierno no podrían ser más claras. Cuando se trata de las necesidades de los trabajadores comunes, no tienen nada que ofrecer. Están recortando los fondos para todo aquello de lo que dependemos, empeorando nuestras vidas. Y, al mismo tiempo, están recortando los impuestos a los multimillonarios en billones de dólares, mientras acumulan una fuerza policial militarizada para brutalizar y aterrorizar a la población.
Sus centros de detención no solo están dirigidos a los trabajadores inmigrantes, sino a cualquiera que se oponga a su agenda. La administración Trump anticipa la oposición de la población a sus horribles políticas. Por eso están trabajando sin descanso para ampliar a ICE y su papel en todo el país, apuntando a los inmigrantes y a cualquiera que se oponga a la administración. Utilizan a los inmigrantes como chivos expiatorios para culparlos de los problemas de este sistema de explotación. Desatan el terror sobre la población y criminalizan todas las formas de resistencia a sus ataques. Están tratando de construir una fuerza policial federal brutal que pueda operar en todas partes sin restricciones legales. La gran mayoría de las detenciones y secuestros efectuados por ICE se han producido sin ninguna orden judicial y sin posibilidad de impugnación legal. Ya se han producido más de 170 casos de detención de ciudadanos estadounidenses por parte de ICE. Se trata de tácticas violentas claramente destinadas a intimidar.
El Gobierno de Estados Unidos está tratando de crear una fuerza paramilitar para utilizarla contra la población. Por ahora, se centra principalmente en los trabajadores inmigrantes con bajos ingresos. Pero a medida que crece la resistencia a sus políticas, están desplegando cada vez más estas tropas de choque contra toda la población, independientemente de su situación migratoria. No podemos permitir que sus tácticas nos intimiden y nos silencien mientras empeoran nuestras vidas. Un ataque contra los trabajadores inmigrantes es un ataque contra todos los trabajadores. Y debemos seguir reforzando nuestras fuerzas para resistir estos ataques.
