
Donald Trump será investido presidente de Estados Unidos por segunda vez el 20 de enero de 2025. En los últimos meses, desde que ganó las elecciones presidenciales, sus promesas y amenazas fuera de lugar son confusas e inquietantes. ¿Anexionarse Canadá y Groenlandia? ¿Apropiarse del Canal de Panamá?
Los desplantes de Trump también han sido aterradores. Ha prometido «¡perforar, nena, perforar!» en busca de más petróleo mientras los incendios forestales queman miles de hogares en Los Ángeles. Dice que encarcelará y deportará a millones de personas, junto con sus familias, que son miembros trabajadores y contribuyentes de nuestras comunidades. Sus altos cargos están dispuestos a aplicar enormes recortes fiscales a los ricos y a recortar los presupuestos de servicios públicos como la educación y la asistencia sanitaria.
Elon Musk, la persona más rica del mundo, está recibiendo un puesto de asesor dentro de la administración de Trump y ya ha provocado el caos con sus amenazas públicas de recortar los presupuestos gubernamentales. El vicepresidente de Trump, JD Vance, invitó a Daniel Penny a reunirse con él en la suite de Trump para el partido de fútbol Army-Navy. Penny es el exmarine que estranguló y mató a Jordan Neely, una artista negra sin hogar en un metro de Nueva York y fue absuelto. Vance envió un mensaje claro a todo el mundo: Penny es un héroe y la vida de Neely no importaba. Este es el futuro que defienden.
Una vez que Trump haya tomado posesión del poder, es difícil saber lo que realmente podrá hacer. Pero sabemos con certeza que no podemos limitarnos a observar y esperar a ver qué promesas o amenazas cumplirá.
La agenda está clara. El objetivo de Trump es aumentar la especulación de las corporaciones, especialmente de sus partidarios, ahora una larga lista de las empresas más ricas y poderosas como Meta, OpenAI, Google y Amazon. Muchos de los creadores del plan de acción«Proyecto 2025» de los think tanks conservadores y de extrema derecha están siendo nombrados para puestos importantes. El gabinete multimillonario de Trump es el más rico de la historia: sin incluir a Musk, tienen un patrimonio neto total de al menos 11.800 millones de dólares. ¿Representan a la gente normal y trabajadora como pretenden?
Esta administración continuará profundizando las divisiones en la población mientras se enriquecen a través de exenciones fiscales y eliminando regulaciones sobre el medio ambiente y la salud y seguridad en el lugar de trabajo. Trump y sus patrocinadores corporativos atacan a los inmigrantes y a otros países para sembrar el nacionalismo e intentar convencernos de que culpemos a nuestros vecinos del empeoramiento de las condiciones vendrán. No quieren que nos demos cuenta de que ellos son los verdaderos autores de la violencia y el robo masivos.
Mucha gente votó a Trump porque creía que mejoraría la situación económica. Sus falsas promesas van a ser una dolorosa bofetada para quienes creyeron en él. Trump no es la causa de los problemas a los que nos enfrentamos. Representa el mismo sistema que representan Biden, Harris y los demás políticos.
La diferencia es que el caos que genera puede llevar a algunas personas a creer que está atacando el origen de los problemas. Trump es un maestro de la política de distracción. Los comentarios salvajes y fuera de lugar que vocifera sobre lo que se le ocurre, alimentando el racismo y atacando a los inmigrantes, a las personas LGBTQ o a los grupos marginados, son una pantalla para encubrir la verdadera agenda.
Los únicos intereses económicos que Trump defiende realmente son los de los ricos. Para ello, significará que nosotros, la gente corriente, pagaremos el precio. Nos enfrentaremos a un mayor coste de la vida, a importantes recortes en los servicios básicos que necesitamos para sobrevivir y a ataques a los derechos que la gente luchó por conseguir en el pasado.
No podemos permitirnos esperar sentados mientras deportan o amenazan con deportar a familiares, amigos y compañeros de trabajo. No podemos aceptar perder el acceso a la salud, la educación, la vivienda y el derecho a respirar aire limpio o beber agua potable. No podemos ver mientras nuestro futuro se destruye.
Podemos actuar ahora, aunque sea a pequeña escala, para prepararnos para las luchas que se avecinan. Hablar con nuestros vecinos, compañeros de trabajo, familiares, y estar dispuestos a confiar en los demás y actuar juntos puede parecer inútil, pero esta es la base de todas las luchas exitosas. Cuantos más seamos los que estemos dispuestos a actuar, más confianza tendremos. Sólo juntos podremos encontrar la manera de resistir y poner fin a los ataques y al caos que se nos viene encima. Sabemos con certeza que los multimillonarios o sus representantes no cambiarán las cosas por nosotros, así que sólo nos tenemos a nosotros mismos para confiar.